Acúfenos o pitidos en los oídos: causas y síntomas

Los solemos describir como zumbidos, pitidos, ruidos… pero estas percepciones en nuestros oídos reciben un nombre específico: acúfenos en los oídos. También conocido como tinnitus, consiste en la sensación de sonido generada en el interior del cerebro pero que no existe realmente en el entorno.

Solamente alrededor del 5-10% son acúfenos objetivos o somatosonidos causados por partes del organismo. En estos casos, también son percibidos por otras personas, como los especialistas, mediante la exploración al paciente. El resto de los acúfenos son subjetivos y percibidos exclusivamente por la propia persona que los padece.

Es importante que sepamos reconocer los síntomas del tinnitus, sus posibles causas y qué hacer ante él, ya que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) es un problema muy frecuente que alcanza al 30% de la población adulta en algún momento de su vida. Se estima que un 10-15% lo experimentan de forma continuada y un 0,5-3% lo perciben como un verdadero problema en su día a día.

Oído por dentro

Causas de los acúfenos

Los especialistas coinciden en que no existe una única causa que explique la aparición de acúfenos en los oídos, pero sí que destacan como uno de los principales factores de riesgo la exposición prolongada a ruidos de elevada intensidad. Esta condición se origina en el cerebro, específicamente en el lóbulo temporal, donde existen áreas dedicadas a interpretar diferentes frecuencias sonoras. Causas de los acúfenos:

  • Problemas mecánicos: Son lo provocados la pérdida auditiva paulatina o presbiacusia. Cuando la cóclea (parte del oído interno) pierde sensibilidad en determinadas frecuencias, las neuronas correspondientes en el lóbulo temporal dejan de activarse. El cerebro, al detectar esta falta de actividad, puede «encender» estas neuronas, generando la percepción del acúfeno. Este fenómeno es comparable al «miembro fantasma» que experimentan algunas personas tras una amputación.

El acufeno no causa la patología, sino que se presenta como consecuencia de afecciones, como la enfermedad de Méniere, alteración del riego sanguíneo, problemas en cervicales o mandíbulas… entre otras.

  • Problemas eléctricos: Sin pérdida auditiva evidente, estos acúfenos están muy relacionados con niveles elevados de ansiedad. Los electroencefalogramas de personas que padecen ansiedad suelen mostrar una actividad eléctrica aumentada en áreas del lóbulo parietal cercanas al temporal. Un incremento en esta actividad puede intensificar la percepción del acúfeno.

Es común que un problema mecánico inicial desencadene ansiedad, lo que a su vez amplifica la actividad eléctrica cerebral, exacerbando el acúfeno.

Partes del cerebro - acúfenos

Los acúfenos pueden ser percibidos en un oído, ambos o en la cabeza, siendo más intenso y constante en algunas personas o en circunstancias en las que no existen sonidos o ruidos ambientales que puedan esconderlo (situación de silencio). Se diferencian dos tipos: los intermitentes, que surgen en períodos breves sin ocasionar pérdida auditiva, y los crónicos, que perduran más de seis meses.

¿Cómo afecta el acúfeno o tinnitus?

El sistema límbico y el sistema nervioso autónomo (SNA) juegan un papel clave en la percepción y el impacto del tinnitus, según el modelo neurofisiológico de Jastreboff (1990). No solo afectan la interpretación del tinnitus, sino que también influyen en las reacciones emocionales y fisiológicas que lo acompañan.

Sistema Límbico: La Respuesta Emocional al Tinnitus

El sistema límbico está relacionado con las emociones, la memoria y la regulación del estrés. En el caso del tinnitus, su función es interpretar la señal sonora que percibe el cerebro.

Cuando una persona desarrolla tinnitus, el cerebro lo detecta como un sonido nuevo y lo compara con experiencias previas. Si la percepción del tinnitus se asocia con una emoción negativa (como ansiedad, miedo o frustración), el sistema límbico lo categoriza como una señal de alarma. Esta reacción emocional potencia la atención hacia el tinnitus, impidiendo que el cerebro lo ignore o lo habitúe, lo que a su vez genera estrés y angustia.

Este proceso es similar a lo que ocurre con otros estímulos auditivos molestos: un sonido nuevo puede parecer irritante hasta que el cerebro aprende a ignorarlo. Sin embargo, en el tinnitus, si el paciente lo percibe como una amenaza o algo grave, se refuerza su percepción y se hace más difícil de ignorar.

Sistema Nervioso Autónomo (SNA): La Reacción Fisiológica al Tinnitus

El SNA regula funciones corporales involuntarias como la respiración, la frecuencia cardíaca y la respuesta al estrés. Se divide en dos ramas principales:

  • Sistema simpático: Activa la respuesta de “lucha o huida” ante amenazas.
  • Sistema parasimpático: Se encarga de la relajación y recuperación del cuerpo.

En el tinnitus clínicamente problemático, cuando el sistema límbico clasifica el tinnitus como una amenaza, se activa el sistema simpático, generando una respuesta de estrés constante. Esto puede provocar aumento de la ansiedad, tensión muscular, insomnio, alteraciones en la concentración y mayor percepción del tinnitus.

A largo plazo, el cuerpo se acostumbra a este estado de alerta, lo que agrava la molestia del tinnitus y dificulta su habituación.

 La combinación de estos sistemas crea un círculo vicioso en el que:

  1. Se percibe el tinnitus.
  2. El sistema límbico lo clasifica como una amenaza y activa el miedo o la ansiedad.
  3. El SNA responde con una reacción de estrés, aumentando la tensión y la atención hacia el sonido.
  4. El tinnitus se hace más molesto debido a la hiperactivación cerebral y el estrés.
  5. Se refuerza la percepción negativa, manteniendo el ciclo.

Este modelo explica por qué algunas personas no se ven afectadas por el tinnitus mientras que otras lo perciben como insoportable. No es la intensidad del sonido lo que determina su impacto, sino la respuesta del cerebro a él.

Tratamiento de los acúfenos:TRT (Tinnitus Retraining Therapy)

Conexión del cerebro con el oído

El acúfeno es un problema que conecta el sistema auditivo con la actividad cerebral de las neuronas.

Esta condición puede presentarse debido a diversas causas (mecánicas y/o eléctricas) y el enfoque para su tratamiento se basará en la reconocida terapia de TRT (Tinnitus Retraining Therapy) enfoque clínico basado en el modelo neurofisiológico del tinnitus, desarrollado por Jastreboff en 1990. Su objetivo es lograr la habituación a la percepción del tinnitus y a las reacciones negativas que este puede generar en los pacientes. La terapia se fundamenta en dos componentes principales:

  1. Consejo terapéutico: Se educa al paciente sobre la naturaleza del tinnitus, explicándole que no representa una amenaza para su salud. Esto ayuda a reducir la ansiedad y a modificar la interpretación negativa del sonido.
  2. Terapia sonora: Se utilizan generadores de sonido o enriquecimiento sonoro ambiental para disminuir el contraste entre el tinnitus y el silencio, facilitando la habituación.

El modelo neurofisiológico sostiene que el tinnitus no es solo un problema auditivo, sino que involucra sistemas cerebrales como el límbico y el sistema nervioso autónomo, responsables de las reacciones emocionales y fisiológicas. La TRT no busca eliminar el tinnitus, sino modificar la respuesta del cerebro, de manera que deje de ser percibido como un estímulo negativo.

De esta forma, la TRT busca modificar la conexión entre el sistema auditivo y los sistemas emocionales y fisiológicos, facilitando la habituación al tinnitus y reduciendo su impacto en la vida del paciente.

Ab expertos en salud auditiva

Poniéndote en manos de especialistas en salud auditiva lograrás controlar los acúfenos en y reducir su impacto en tu vida diaria, ya que te ayudarán a recuperar el control y a gestionar los síntomas de los mismos. Los signos no son iguales en todos los individuos, por lo que cada persona necesita un tratamiento personalizado.

El asesoramiento de los profesionales auditivos de Ab y los mejores audífonos en Zaragoza pueden proporcionarte, sin duda, una mejor calidad de vida.